La Policía ha detenido en España a un hombre, de 48 años y de baja estatura, acusado de abusar sexualmente de mujeres a las que captaba en la red simulando ser un chamán o curandero.
Luego empleaba burundanga para narcotizar a las víctimas y poder violarlas. Los agentes sospechan que abusó de muchas mujeres aunque creen que podría haber más denuncias de no ser por la vergüenza de las mujeres o la sensación de irrealidad de los hechos.
El caso salió a la luz la semana pasada cuando una joven denunció en el SAM que acaba de sufrir abusos sexuales. La mujer aseguró que estaba trastornada y que era consciente de que su relato era incomprensible.
Explicó que cuando estaba en el centro de Madrid un hombre enano, con el síndrome acondroplasia, un trastorno del crecimiento óseo cuyo tipo más frecuente es el enanismo, se acercó a ella y empezó a hablarle. No desconfió del hombre debido al aspecto frágil del individuo y al hecho de que se encontrase en una zona muy transitada.
El hombre utilizó un lenguaje esotérico y simuló ser un chamán o curandero. Cuando la mujer empezó a leer un periódico que le entregó el sospechoso, comenzó a sentir una tranquilidad desmesurada y estar muy relajada e inestable.
Aseguró que era tal la pérdida de percepción de realidad que sufría que, sin oposición y de una forma que no lograba entender, le facilitó su teléfono y la dirección de su casa.
Ambos fueron a su domicilio donde sólo recordaba que el hombre tomó algo en el salón y que el individuo le obligó a beber del mismo vaso. La mujer se sentía cada vez más relajada hasta llegar a perder la noción del tiempo aunque no la conciencia. Durante el tiempo que el hombre estuvo en la casa abusó de ella en varias ocasiones.
Los agentes iniciaron la investigación y descubrieron que, en varios foros de Internet se alertaba de la existencia de una persona de baja estatura que abusaba sexualmente de jóvenes. Simulaba ser chamán y tras varias averiguaciones fue localizado y detenido en su casa.
Se cree que debido a su inferioridad física sedaba a las víctimas con una poderosa sustancia, el burundanga, que anulaba la voluntad de las mujeres.
Del análisis de la información obtenida, los agentes creen que puede haber más víctimas debido a que su zona de actuación era el centro de la capital y pudiera tratarse de turistas o población itinerante que no denuncian los hechos.
Por ello, desde la Jefatura Superior de Policía de Madrid, se informó a cualquier persona que pudiera ser víctima de este individuo que puede ponerse en contacto con el teléfono 91-322.35.58 para denunciar los hechos o acudir a una comisaría.
La investigación está siendo llevada a cabo por agentes del grupo III del Servicio de Atención a la Familia, pertenecientes a la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.